lunes, 22 de noviembre de 2010

Resolución de solidaridad del PCM con el camarada José Campaña, el "caminante obrero"

Aprobada por práctica unanimidad

Resolución de solidaridad con el camarada José Campaña, el "caminante obrero"

Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
caminante, no hay camino
se hace camino al andar.

Al andar se hace camino
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar

Los/as camaradas presentes en la conferencia sobre república del PCM expresamos nuestra solidaridad con el camarada José Campaña Rivas, el "caminante obrero".

Harto de aguantar ser parte permanente del "ejército de reserva" que el gran capital necesita para sostener las malas condiciones laborales de la clase obrera (especialmente en tiempos de crisis como los que sufrimos), harto de ver como la limosna que ofrece el estado por tiempo limitado no llega para la mínima existencia digna de su familia, harto de ver como la riqueza que creamos los/as trabajadores/as se le regala por millones de euros por parte del gobierno a los bancos, a la casa del borbón o a la santa madre iglesia, harto de sentirse avergonzado por no tener trabajo, salió de su casa, que no sabe hasta cuando podrá pagar, en Mairena de Alcor cerca de Sevilla y empezó a andar.

Al principio no sabía donde iba, no podía pensar, sólo podía andar. Y así caminó por llanuras, por estepas, por valles y por sierras, conociendo el sol abrasador y la lluvia fría.

Y cuantos más kilómetros recorría, más crecía su indignación y más conciencia adquiría de la opresión que él y su clase, la clase trabajadora, sufre por parte de este sistema voraz y antihumano.

Y así según su estado físico se iba destruyendo, su conciencia se hacía más clara. Y según pasaban los pueblos, las provincias, las comunidades, encontraba muchos camaradas, muchos compañeros/as y también mucha gente anónima que le sonreía, le animaba, le ayudaba. Algunos/as caminaron con el un trozo del viaje, otros/as le acompañaron en sueños y cuando quiso darse cuenta estaba a las puertas de "la casa del pueblo" con su camiseta a modo de pancarta: DERECHO AL TRABAJO, DIGNIDAD.

Allí, frente al Congreso de los Diputados, donde sus señorías dictan leyes en contra del pueblo que les ha elegido, leyó un largo discurso que había ido escribiendo mientras caminaba y se fotografió al lado de camaradas y compañeros/as con la bandera republicana delante de los famosos leones que también parecían sonreírle.

Necesitamos más "caminantes obreros", necesitamos mover muchas conciencias, necesitamos incorporar a la lucha a muchos/as trabajadores/as y esa debe de ser la tarea fundamental del partido.

La solidaridad, la fraternidad y la igualdad características de la República pueden ser el motor que dinamice ese movimiento de conciencias. Sigamos caminando para que al volver la vista atrás lo que veamos sea la masa de la clase obrera dispuesta a luchar por su liberación.

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