viernes, 18 de febrero de 2011

Para los responsables, la partida está perdida, la canción de "... y mi palabra es la Ley", ya no tiene cabida cuando la Justicia entra en juego

Asustado estoy, que no me llega la camisa al cuerpo, desde que esto de las Torrecillas ha dejado de ser un rumor para pasar por delante de la Guardia Civil, primero y del Juez después. Ya no tiene vuelta atrás y estamos en manos de la benevolencia de una Justicia que se siente airada por esta mosca cojonera que le ha salido en Marmolejo y que insiste en saltársela a la torera. Por eso, por temor y solidaridad con mis vecinos, voy a ser cauto y preciso y no hay mejor medicina que homenajear la verdad y llamar a las cosa por su nombre.

No se en cuantos ayuntamientos de Andalucía la irresponsabilidad de un Equipo de Gobierno, con el Alcalde al frente, ha puesto en un brete de cumplir condena, amén de tener que pagar multas escandalosas y peligrar la propia vivienda, a cientos de vecinos, creo que en ninguno, y esto es lo triste, que hasta en esto se ha propuesto el Ayuntamiento en hacerlo todo a lo grande. Y cualquiera que se ponga en el pellejo de los afectados se le ponen los pelos como escarpias y se les quita la gana de fiestas, no hay derecho, porque es gravísimo que a partir de ahora medio pueblo va a tener antecedentes penales además de estar pasando uno de los peores tragos de su vida.

Si yo fuera responsable de todo esto, daría mil duros por despertar en cualquier momento, por pellizcarme y comprobar que todo ha sido un mal sueño y en caso contrario, no andaría removiendo el asunto esperando aún en estos penosos momentos sacar algún beneficio político o personal. Y es que hay quien no escarmienta. Los socialistas de Marmolejo, en vez de unirse para expulsar a los responsables y entonar un mea culpa colectivo,dándose los golpes de pecho necesarios y arrastrar las cadenas de la vergüenza por apoyar a semejantes compañeros de partido, están terminando de meter la pata y algunos cierran filas en torno al líder de forma visceral, cuando todo está ya perdido, como los últimos partidarios de un régimen caduco que se resisten a entregar el poder y rendir cuentas. Ni siquiera en esta hora aciaga piensan en el pueblo, en sus vecinos que lo pasan mal, antes que en ellos mismos. ¿A qué tienen miedo?

Para los responsables, la partida está perdida, la canción de "... y mi palabra es la Ley", ya no tiene cabida cuando la Justicia entra en juego y reclama la potestad de la auténtica Legalidad, la de todos, y no la de un reyezuelo trasnochado e insumiso. No es la primera vez que la Justicia interviene para recordar que nuestro Alcalde no está por encima de ella, y tememos que, si hubiera la necesaria transparencia, tampoco sería la última.

Pobre Marmolejo y pobres marmolejeños, enredados en una madeja de despropósitos, sin pies ni cabeza, a la que hay que poner fin cuanto antes. Solo una ambición desmedida y una total falta de escrúpulos explica las actuaciones disparatadas de unos señores que están arruinando a un pueblo, desgraciando a sus vecinos y complicándoles la vida hasta límites espeluznantes. Aún hoy el gobierno del miedo está presente en todo el proceso y la inseguridad de los ciudadanos, que no se han visto nunca en estas lides, se hace patente a la hora de fiarse o no de los medios y reuniones que el propio partido socialista convoca a diario para "controlar" el asunto y temen que si no acatan las directrices socialistas, puedan salir más perjudicados aún. Y es que la famosa frase de " yo ni olvido, ni perdono", todavía resuena alto y claro en la conciencia del apaleado pueblo.

Con la ley en la mano, hasta los albañiles que participaron en las obras de las naves, tienen cuota de responsabilidad por lo que el hilo del que fiscal y juez van a tirar puede afectar a muchos vecinos, un disparate, que desgraciadamente tenemos encima y nos afecta directamente. Por lo que estamos en manos de  los profesionales de la Justicia y esperemos que después de las primeras declaraciones, que van a ser en pocos días, vaya haciéndose algo de luz y nos tranquilicemos un poco. Suerte a los vecinos afectados y contad con toda nuestra solidaridad, y a lo responsables, Justicia con ellos.

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