miércoles, 29 de junio de 2011

La lealtad más absurda de todas es la lealtad al fracaso y la ruina de Marmolejo y sus vecinos, apostar por ella es de locos, incautos o mafiosos.

A veces, cuando todo está perdido, solo una cortina de humo puede facilitar la huida, pero esta vez, no.

Para algunos ha llegado el momento de coger las de Villadiego, pero precisan del último movimiento de distracción, necesario para escapar por la puerta falsa intentando salvar los muebles, a sabiendas de que es un gesto inútil, huir de un pasado tan público como dañino, ya que el brazo de la Justicia llega inexorable a todos los rincones, por muy jiennenses que sean, o al menos debiera ser así.

Cuando los músicos del Titanic decidieron hundirse con el barco, no lo hicieron para cubrir a su capitán, distrayendo al personal, mientras este se escondía en el bote que le salvara el pellejo, lo hicieron por pura y simple lealtad a su oficio, ellos creían en lo que hacían, tenían fe en la utilidad de su música y decidieron terminar intentando poner un poco de armonía, de orden, en el caos definitivo del hundimiento.

En Marmolejo, está pasando algo diametralmente opuesto; otros "músicos", alguno engañados y otros no tanto, están haciendo ruido, que es lo único que les sale del alma, nada artístico, nada cultural, nada aprovechable, nada lógico ni ideológico, nada coherente, solo ruido. Son dirigidos por su líder y adláteres en un intento por salvar el cuello, para que les distraigan al personal en una huida desesperada de un barco que ya está perdido, dejando atrás a los demás, porque saben que puede ser peor si les cogen y les piden explicaciones, ya que este navío socialista no se ha hundido al chocar con ningún iceberg, ni con nada de fuera..., lo han hundido desde dentro, a base de acumular basura en su interior, la misma que ahora quieren ocultar.

La mala o nefasta gestión, el trato degradante a la marinería y al pasaje y sobre todo el despilfarro continuado y el empobrecimiento sistemático de los proveedores locales y el pueblo, habrieron una brecha que, además de poner a pique esta nao llamada Marmolejo, puede dejar a la luz muchas sorpresas, ya que todavía no se ha auditado en profundidad las cuentas, ni se han investigado otras ramificaciones, posibles maniobras y aventuras, que si se hace caso a la rumorología, pueden traer cola, vamos, que dan miedo.

El movimiento de distracción consiste, simplemente en arremeter contra el nuevo orden constituido legal y democraticamente, solo eso, arremeter, insultar a las personas, despotricar donde les escuchen, aunque ya nadie les quiera ni oír, desviar la atención de lo principal, que son los tejemanejes de una clase depravada y amoral que se ha limpiado las botas con las aspiraciones y el futuro de un pueblo, para que mientras y por lo bajini, intentar poner al día asuntos y disimular agujeros, amedrentar a testigos y pedir lealtades absurdas, lealtades al fracaso, buscando engañar a incautos para que tapen algo, torpedeen los trabajos municipales o  quieran caer por ellos cuando llegue la hora de la verdad.

Buen intento, aunque fallido, porque estos ya no engañan a nadie y cada día el pueblo tiene más claro donde tiene que mirar para que nadie vuelva a liarlo con mentiras, falsas promesas y cuentos chinos. Marmolejo va siendo dueño de su dignidad y ya no la presta más para que la pisoteen, ni bajo amenazas, ni bajo promesas, después de haber sido esquilmado en lo material, económico y laboral, lo que le queda, el derecho a aspirar a un mañana mejor, más limpio de sinvergüenzas y más ilusionante, eso ya no se lo quita nadie, por mucho ruido que hagan e intenten distraerlo para volver a robarle la cartera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

La libertad y el respeto son repelentes contra el fascismo. Ejercita este principio compartiendo tu opinión, hablando se entiende la gente.
El administrador de este blog no se responsabiliza de los comentarios a las entradas y no permitirá insultos ni injurias a personas o instituciones, borrando los comentarios no respetuosos.